¡Y YO TAN FLAMENCA!

¡Hola a todo el mundo! ¿Cómo ha ido Septiembre? A mi fenomenal ya que he disfrutado de mis vacaciones y aún me queda el regustillo del viaje.

Como podréis imaginar mi maleta iba llena de ropa hecha por mí y una de las prendas estrella era esta blusa que os quiero mostrar.

 

 

Se trata de la blusa Taffy de Colette. Es la segunda vez que realizo este patrón, la primera os la mostré aquí, pero después de ver esta versión de Maider me picó el gusanillo, así que decidí repetirla y utilicé una tela preciosa que tuve la suerte de comprar durante mi viaje de Semana Santa.

 

 

Hablando de viajes, qué mejor lugar para fotografiar esta blusa que en el Museo Julio Romero de Torres en Córdoba. Desde luego el modelo no tiene nada que ver con la "Chiquita piconera" ni con todo el arte que he tenido la oportunidad de ver en Andalucía, pero ahí va mi pequeño homenaje para esa tierra a la que pienso volver a visitar siempre que tenga ocasión.

 

 

Y esto es todo lo que puedo mostrar por el momento, pero aviso que volveré pronto con el resultado de mi primera incursión en el mundo del punto y ganchillo, además de haberme unido al nuevo reto que propuso Mónica: ¿Qué prendas necesito? Como veis el salmorejo y el vino de Montilla-Moriles han ayudado a recargar mis pilas.

 

¡Feliz Octubre costurero!

 

CAMÍ DRESS

He tenido el honor de ser elegida por Pauline para testar su primer patrón, os cuento como ha sido la confección y la impresión que me ha causado.

Se trata de un vestido con aire retro, la parte superior es camisera con pinzas en espalda y dos únicas pinzas delanteras desde el pecho hasta la cintura. La falda va fruncida y lleva bolsillos laterales escondidos. En el patrón se pueden elegir dos versiones, A en manga corta y B en manga tres cuartos con un puño de adorno.

  

Yo me decidí por el de manga corta y pedí permiso a Pauline para no fruncir tanto la falda como el patrón sugiere, pero sin variar el diseño, ella accedió amablemente.

Para este  vestido he elegido una tela de cuadros morados y blancos con un poquito de cuerpo que, creo, va perfecta al modelo y a mis zapatos nuevos. Los botones de color morado enmarcados en dorado van cosidos también con hilo dorado.

Mi talla es la 42 y  mis medidas se adaptaron bien al modelo. Sólo abrí un pelín más las pinzas delanteras, las horchatas y las cañitas veraniegas... "you know what I mean".

Teniendo en cuenta que estoy acostumbrada a coser a la antigua, o sea con puntos flojos e hilvanando y que con este patrón no ha sido necesario porque ya viene el margen de costura, ha sido bastante rápido. Las instrucciones me han parecido claras y en el patrón venían muy bien marcados los aplomos para que no hubiera duda a la hora de montar las piezas. No diré que ha sido coser y cantar porque el cuello tiene su trabajo y los ojales también tienen lo suyo pero el resto de la confección ha sido sencilla.

  

Es un patrón que recomiendo, lo encuentro muy ponible y es una maravilla ver que conforme lo coses va tomando la misma forma que el dibujo del modelo.
Seguro que volveré a hacer este vestido, puede tratarse de un patrón comodín y espero hacer la versión de invierno con manga 3/4.