Primero, el exterior está hecho con tela de una de mis primeras faldas. Me encantó la falda y este bolso no podía ser menos. El interior es de una tela que estaba en oferta del R&C que, junto al grogen que usé para personalizar las asas, da un resultado fenomenal.
Segundo, utilicé tela que me sobró de vestidos que cosí el año pasado y las asas las decoré con cintas de cuadros de dos tipos distintos pero que combinaban a la perfección. La cremallera me costó una barbaridad y tomé nota mental de tomar un atajo para los siguientes bolsos.
Tercero y cuarto: puse la directa. Adorné las asas cortas con las mismas cintas de contraste que puse en la base. Los bolsillos de plastón por ambos lados y algunos dentro de los otros. A las destinatarias les gustaron mucho.
Quinto, un poco más oscuro pero no menos bonito. Utilicé dos telas diferentes pero con tonos coordinados. El bolsillo es de plastón pero va con cremallera, ya sabeis, el atajo.
Y esto es todo en cuanto a bolsos, de momento, porque tengo tres más cortados de este mismo modelo y estoy haciendo acopio de telas preciosas para otros modelos que tengo en mente.
Espero que alguno sea para mi, porque hasta ahora los he regalado todos.
¡Feliz fin de semana, costureras!